La ablación sexual es la mutilación de parte de los genitales externos femeninos para evitar sentir placer sexual, con la finalidad de que pueda llegar virgen al matrimonio, puesto que si no es de ese modo, la mujer puede ser rechazada. También se realiza para evitar la supuesta promiscuidad de la mujer y asegurar que solamente tenga hijos con el marido. La pérdida casi total de sensibilidad es la principal consecuencia para las afectadas, con el añadido trauma psicológico. Hay mujeres que mueren desangradas o por infección en las semanas posteriores a la intervención, ya que se realiza casi siempre de manera rudimentaria, a cargo de curanderas o mujeres mayores, y con herramientas no muy ortodoxas como cristales, cuchillos o cuchillas de afeitar y nunca en centros sanitarios.
La embajadora de la Organización de las Naciones Unidas contra la ablación, la ex modelo somalí Waris Dirie, quien sufrió infibulación a los 5 años, ha conseguido que ésta práctica sea ilegal en algunos países africanos, aunque se siga practicando de hecho. Unicef, en un informe, afirma que ésta práctica se puede eliminar en una generación si hay un esfuerzo cultural.
Waris Dirie
Mediante la realización de campañas comunitarias de concienciación se trata de transmitir el mensaje contra la mutilación genital femenina a los sectores importantes de la población, como los líderes tradicionales y religiosos, la juventud, los docentes, las enfermeras, las comadronas tradicionales y las mujeres que realizan la ablación del clítoris. En 2003, el gobierno del Níger aprobó una ley que impone multas y penas de prisión a quienes realicen esas operaciones.

1 comentario:
Realmente me has dejado sin habla, sabia del tema pero no lo habia abordado tanto... Que horrible de verdad lo que las mujeres tenemos que soportar por el simple hecho de ser mujeres(segun el sexo debil), pero mas lamentable es que todavia en este siglo hayan hombres que piense que somos solo su objeto y sean tan mediocres.
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